El 2021 era un año esperado por los fanáticos de Xiaomi, ya que en el mismo se daría la presentación de su nuevo smartphone, que pasaría a ser el buque insignia de la empresa, estamos hablando de Mi 11.
Pero pese a que se dio su lanzamiento, el año para esta compañía no arrancó como esperaba, ya que la pasada administración del Gobierno de Estados Unidos, encabezada por Donald Trump, tomó la decisión de incluir a la empresa en su lista negra.
En esta sentido, Xiaomi entró en la lista de empresas que están inmersas en la disputa comercial entre Estados Unidos y China, en las que también se encuentran reconocidas firmas tecnológicas como Huawei y ZTE.
Esta ocasión en Amuletosde, estamos acá para hablarte del nuevo capítulo que tiene esta historia, entre Xiaomi y el gobierno de Estados Unidos.
Xiaomi a la corte
Desde que el gobierno de Estados Unidos tomó la decisión de incluir a Xiaomi en su lista negra, la empresa no ha perdido el tiempo y no solamente se ha centrado en sus dispositivos electrónicos, sino también en tomar accione en este tema.
En este sentido, Reuters ha informado que la firma tecnológica ha presentado una denuncia legal contra los Departamentos de Defensa y del Tesoro de Estados Unidos, calificando la prohibición de inversiones como “ilegal e inconstitucional”. Además, adelanto que las afirmaciones de vínculos con el ejército chinos son falsas y que la falta de inversiones estadounidenses conduciría a un “daño inmediato e irreparable”.
Por otra parte, la firma asiática dio a conocer que el 75% de sus derechos de voto pertenecen a los cofundadores Lin Bin y Lei Jun, por lo que no existen personas u organizaciones vinculadas al ejército con propiedad. De igual forma, señaló que un “número sustancial” de accionistas eran estadounidenses y que tres de sus accionistas más destacados eran grupos de inversión de Estados Unidos.
Cabe agregar, que Xiaomi dejó claro que la simple implicación con el ejército chino “perjudicaría significativamente” sus acuerdos comerciales.
Luego de esta presentación de argumentos, habrá que esperar que tan bien le va a Xiaomi para evitar su permanencia en la lista negra de facto, que entrará en vigencia a partir del próximo 15 de marzo. Hay que decir, que la combinación de productos de la empresa podría tener consecuencias a su favor, algo que no sucedió con Huawei. Xiaomi no tiene un negocio de infraestructura de telecomunicaciones por lo que no puede plantear una amenaza de espionaje.
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En este sentido, la empresa podría argumentar que ningún grupo militar estaría interesado en asociarse con esta empresa para realizar espionaje, ya que la compañía está centrada básicamente en fabricar teléfonos inteligentes convencionales y dispositivos domésticos inteligentes.
Así que habrá que esperar como se desenvuelve esta historia.